El azúcar es el edulcorante por excelencia. Desafortunadamente, sin embargo, representa un alimento que a menudo causa problemas a quienes lo comen. Por ejemplo en diabéticos o personas que siguen regímenes dietéticos estrictos.
¿Entonces lo que hay que hacer? ¿Dejar de endulzar tu café por la mañana también?
La solución es encontrar alternativas válidas, igual de dulces pero más saludables. Por eso, la llamada stevia estrictamente vegetal se ha abierto camino en la despensa de muchas personas. No eleva los niveles de azúcar en la sangre, no contiene carbohidratos, tiene cero calorías y es 100% natural. Unos pocos gramos de stevia son suficientes para endulzar cualquier bebida o plato casero. Y hoy tenemos muchas ganas de hablaros de la stevia: qué es, qué beneficios aporta al organismo y por qué se debe sustituir por azúcar.
Y luego analizaremos juntos la delicada relación entre los edulcorantes y los diabéticos y cómo puede ser más manejable asociando la stevia y la diabetes sin tener repercusiones en la salud.
¿Qué es la stevia y por qué sustituirla por azúcar?
Stevia nace usando las hojas de una planta particular que se origina en América del Sur y Brasil. Se llama Stevia rebaudenia y los lugareños siempre la han utilizado para endulzar sus platos. Dentro de sus hojas contiene sustancias edulcorantes naturales (glucósidos de esteviol) las cuales son extraídas, procesadas y luego utilizadas en la elaboración de la stevia en sobres que conocemos y compramos en el supermercado.
Una vez conocido su poder edulcorante y sus efectos beneficiosos sobre el organismo humano, fue fácil que la stevia asumiera un papel importante en nuestras mesas y en particular en las de aquellos que consideran al azúcar un enemigo para su salud y deben evitarlo absolutamente.
Azúcar y Stevia: ¿Qué los hace tan diferentes? Primero están las calorías que son cero en la stevia pero evidentes en el azúcar de mesa. Además, este último puede tener efectos nocivos para la salud, ya que aumenta los niveles de azúcar en sangre y puede provocar un aumento de peso si se consume en exceso. De hecho, médicos y nutricionistas desaconsejan tomarlo en determinadas condiciones de salud y si estás siguiendo una dieta baja en calorias y bajo en azúcar.
La stevia, por su parte, no tiene contraindicaciones en este sentido y es la elección ideal para quienes buscan un producto dulce pero saludable.
Los beneficios de la stevia para el cuerpo
Después de entender que el azúcar se puede sustituir por la stevia vegetal obteniendo beneficios para la salud, vamos ahora a descubrir cuáles son esos efectos positivos que podemos aprovechar añadiendo el edulcorante natural en nuestro té o en nuestras recetas.
Aquí están algunas:
- Disminuye los niveles de glucosa en sangre;
- No engorda porque no tiene calorías;
- Tiene carga antiinflamatoria;
- Reequilibra los valores de presión arterial;
- Reduce el colesterol malo;
- Disminuye el riesgo de problemas cardíacos;
- Combate la obesidad;
- Previene la formación de caries en los dientes.
En consecuencia, es natural que entre el azúcar y su alter ego natural se elija este último. Incluso si a menudo alguien todavía rechaza la idea de abandonar el azúcar habitual para dar paso a la stevia. La razón está en el sabor: aunque es dulce en su punto justo, puede que a algunos no les guste por su retrogusto que recuerda al sabor del regaliz. Evidentemente es un factor subjetivo que depende del gusto personal.
Stevia y diabetes: en qué dosis tomar el edulcorante
Los que padecen diabetes saben muy bien que no pueden consumir azúcar. Pero, ¿puede endulzar sus comidas con stevia?
¡La respuesta es sí! La razón es simple y se anticipó cuando enumeramos los beneficios de este extracto de planta natural. Stevia no eleva los niveles de azúcar en la sangre y por lo tanto no tiene efectos nocivos para los diabéticos.
Como edulcorante de bajo índice glucémico, la stevia es, por tanto, la más adecuada de todas las conocidas actualmente.
Pero hay más: no solo no contribuye a elevar los picos de azúcar en sangre, ¡sino que los regula! De hecho, los glucósidos de esteviol producen insulina endógena que actúa directamente sobre el equilibrio glucémico.
Aunque sea bueno para la salud, conviene no abusar de él, tanto en el caso de los diabéticos como en todos los demás. La dosis ideal sigue siendo de 4 mg/kg de peso corporal al día. Los prácticos sobres que encontramos en el supermercado ya vienen dosificados y permiten no confundirse con las cantidades.
¿Dónde usar la stevia? Consejos y direcciones
Stevia y diabetes: ¡hemos dejado claro que son una combinación ganadora! Sin embargo, todavía existen algunas dudas sobre el uso de la stevia, especialmente sobre cómo tomar el edulcorante en relación con los alimentos y bebidas preparados en casa.
Así que veamos cómo y dónde usar la stevia en casa. En palabras simples podemos decir que debe usarse exactamente como lo hacemos con el azúcar.
Se añade a las bebidas: té, café, limonada, batidos, pero también a algunos alimentos como la leche, el yogur sin azúcar y los cereales para el desayuno.
Evidentemente nunca debe usarse junto con sacarosa, aspartamo o miel, de lo contrario se anulan sus beneficios y aumentan los riesgos para los diabéticos.
La stevia también es excelente para los alimentos que deben cocinarse. En estos casos, sin embargo, solo es necesario prestar atención a las combinaciones: recuerda que el sabor azucarado no es idéntico al azúcar de uso común y, por lo tanto, debes experimentar un poco para probar los sabores según tus preferencias.
Stevia y diabetes: ¿contraindicaciones?
A pesar de la opinión positiva de los nutricionistas también, es bueno hablar sobre las posibles contraindicaciones relacionadas con el uso de la stevia en el hogar.
Como todo alimento saludable rico en beneficios, si no se toman algunas precauciones, se corre el riesgo de transformarlo en un edulcorante común que también puede tener contraindicaciones. Aunque es excelente para reducir el azúcar en sangre en pacientes con diabetes, no se debe abusar de él.
Es necesario realizar controles periódicos para verificar que estos niveles no estén por debajo de la media habitual. Si esto ocurre, se produce la llamada hipoglucemia, que en los pacientes diabéticos puede provocar efectos secundarios, por ejemplo el más grave es el coma diabético. Esta situación obviamente se aplica a aquellos que usan stevia de manera continua.
Alguien también afirma que la stevia tomada en cantidades excesivas puede tener efectos laxantes. Sin embargo, esto depende de las dosis que se tomen y no de la composición natural de la stevia que en dosis regulares no provoca ningún efecto sobre el intestino. De hecho, ¡hace que la comida sea aún más digerible!
Consejos para un uso ponderado de la stevia
En conclusión podemos decir sin dudarlo que la stevia es un excelente sustituto del azúcar.
Sin embargo, nos vemos obligados a darte un último consejo: siempre presta atención a los productos que compras y no te fíes de las apariencias. Desafortunadamente, muchos productos a base de stevia a menudo se someten a un tratamiento adicional para cancelar el regusto de la planta. En consecuencia, antes de llegar al producto final son tratados con azúcares añadidos.
Estos azúcares, llamados alcoholes de azúcar, se obtienen de la fruta: eritritol, dextrosa, maltitol. El primero es el menos dañino porque está desprovisto de calorías y carbohidratos. Estos últimos, en cambio, la contienen, aunque en pequeñas cantidades, y si se toman en dosis excesivas pueden afectar los niveles de glucosa en sangre, reduciendo e incluso anulando los beneficios de la stevia. Por eso, los diabéticos, pero también aquellos que cuidan su salud y buscan alimentos saludables, siempre deben estar atentos y leer las etiquetas de los alimentos para asegurarse de elegir el producto más adecuado a sus necesidades.
